Durante estos días, en el entorno de los Canchales se puede disfrutar de la flor de la jara, cuya floración se encuentra en su máximo apogeo.
La jara es una planta leñosa, de hoja perenne y silvestre aunque hoy en día se han desarrollado algunos híbridos muy apreciados en jardinería por sus flores. Cuando llega la primavera, la jara se llena de grandes flores que dependiendo de la especie pueden ser blancas, rosas, o purpúreas.
Es la Jara del Ládano la predominante en el entorno de Los Canchales. También llamada jara pringosa, esta especie se caracteriza por sus grandes flores siempre blancas y por tener sus largas y estrechas hojas impregnadas de ládano, (resina fuertemente olorosa) que les da un aspecto brillante y se adhiere fácilmente a las manos y ropa. Sus flores son muy grandes (10 cm) y con cinco pétalos blancos.
Las flores solo duran una jornada, pero la floración es continua, regular y muy abundante lo que hace que Los Canchales permanezcan durante varias semanas cubiertos por vistosas manchas monocolor.
Desde el punto de vista social y cultural, ha sido muy apreciada, ya que su madera es muy dura por lo que se ha utilizado tradicionalmente para fabricar utensilios resistentes al desgaste como los bolillos de bordar y también para leña y carbón vegetal así como para multitud de remedios caseros.